Hace unos 8 años, cuando apenas me adentraba más en esto del arte culinario, me chocaba leer una receta que dijera «mantequilla a temperatura ambiente». Ya con eso tenía para poner la receta de lado y buscarme algo más qué hacer, pues ya sabía que podía tomar de 1 a 2 horas para que la mantequilla, que está en el refrigerador, pudiera llegar a temperatura ambiente. ¡Pero yo quería hacer esa receta en ese momento! Sí, desafortunadamente, así funcionan los antojos.

Tengo que confesar que no soy fan del horno de microondas, y me deshice del que teníamos precisamente por los efectos negativos que puede traer el utilizarlo. Y es por eso que cuando le preguntaba al señor internet «cómo llevar la mantequilla a temperatura ambiente» y lo único que encontraba era «metiéndola al microondas», se me quitaban las ganas por completo de hornear.

Sí, el microondas es una herramienta muy conveniente, pero el problema con este método es que el microondas no calienta de manera uniforme. Así que me di a la tarea de buscar una manera de llevar la mantequilla, y otros ingredientes, a temperatura ambiente sin el uso del microondas.

Pero a todo esto, ¿qué significa temperatura ambiente? Créanme que cuando vives en un lugar donde los veranos el «ambiente» esta a 38ºC y en invierno llega hasta los -20ºC, esta frase de «temperatura ambiente» pierde completamente su significado. Pues bueno, temperatura ambiente sólo se refiere a la temperatura ideal para el ser humano, independientemente de si somos amantes del calor o el frío, es la temperatura en la que el cuerpo humano está cómodo. Esta temperatura de la que hablo es alrededor de 20ºC (68ºF), y es la ideal para que los ingredientes que utilizamos en pastelería, panadería y repostería se integren perfecto y hagan magia en el horno.

Hay diferentes ingredientes que encontramos en las recetas que piden que estén a temperatura ambiente, los más comunes son la mantequilla, el huevo, el queso crema y la leche. Para ingredientes líquidos, como la leche, la solución es muy sencilla; basta con calentarla uno o dos minutos en la estufa. Sin embargo, para ingredientes como el huevo y la mantequilla, que no podemos calentar directamente en el fuego porque cambian por completo (uno se cocina y solidifica, y la otra se derrite y hace líquida), existen algunos trucos para lograr que lleguen a temperatura ambiente rápidamente y sin complicaciones. Aquí les cuento.

los huevos…

Los huevos deben estar fuera del refri por más o menos 1 hora para alcanzar la temperatura ambiente. Nunca, por nada del mundo, debes intentar calentarlos en el microondas.

Lo que debes hacer para llevar los huevos a temperatura ambiente, es poner agua caliente en un recipiente y sumergirlos ahí por unos 5-10 minutos. El agua del recipiente no debe estar tan caliente que te quemes al tocarla; piensa en la temperatura en la que te gustaría a ti el agua para darte un baño cuando tienes mucho frío, esa es la ideal 😉

la mantequilla…

(y otros ingredientes como queso crema)

Este ingrediente es muy especial, y por lo tanto, muy «sangrón» de repente. De este ingrediente, y la temperatura en la que esté, depende que nuestras galletas no salgan todas aplastadas y grasosas, que nuestras masas y panes esponjen bien bonito, y que nuestros frostings queden perfectos.

A la mantequilla debes darle el tiempo suficiente para estar suave y flexible pero no tan aguada que se hunda tu dedo si la tocas. De hecho, la manera de saber si está a la temperatura ideal es presionando tu dedo sobre ella, como en esta foto de Design mom, la mantequilla se siente suave pero no se hunde tu dedo por completo.

El método que prefiero usar yo para llevar la mantequilla a temperatura ambiente sin problemas, es cortando la mantequilla en cuadritos y dejándola reposar por unos 15 minutos, a lo mucho media hora. El tiempo que la dejes reposando, depende mucho de la temperatura en la que esté tu casa. Pero en un clima regular, esto es lo que toma, solo debes estar bien al pendiente si vives en un lugar muy caluroso, para que no se suavice de más.

Puedes usar el truco del microondas si así lo deseas, y esto es metiéndolo en 3 o 4 intervalos pequeños de 5-10 segundos en la opción de «descongelar». Sin embargo, sé que el microondas tiende a empezar a derretir la mantequilla en la superficie y no toma más que 1 segundo que se pase de la temperatura ideal, y es por eso que no recomiendo este método. Es mucho más confiable sacar la mantequilla, cortarla y dejarla reposar mientras sacas los demás ingredientes y los mides para hacer tu receta, así la espera no es tan larga.

Espero que estos tips les sirvan para la próxima vez que necesiten un ingrediente a temperatura ambiente, sobre todo ahora con la temporada de fiestas y el clima frío de invierno que invita a hornear. Y si ustedes conocen algún otro método para lograr que los ingredientes estén a temperatura ambiente rápida y fácilmente, ¡cuéntenme en los comentarios! Me encanta aprender cosas nuevas 😉

Y no olviden visitar mi sección de Tips de Cocina, donde encontrarán varias cosas que les ayudarán a que sus postres, panes y pasteles les queden siempre perfectos 🙂

¡Feliz fin de semana!

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