Les comparto mi experiencia y unas cuantas fotos que tomé el día del #ManosalaMasaWorkshop, nuestro primer workshop de Panadería Casera. Las fotos no son las mejores, pues son tomadas con el teléfono, y ya se imaginarán lo difícil que es tomar fotos con las manos llenas de harina, masa y demás, jeje. Pero espero que las disfruten y se animen a participar en uno de estos pronto 🙂

Hace semana y media tuve la padrísima oportunidad de abrir las puertas de mi casa para enseñar a chicas maravillosas un poco de la maravilla y arte de hacer pan en casa. ¡Fue una experiencia padrísima! Mi casa se lleno de energía, ánimo y un olor maravilloso a pan recién hecho.

¿Les ha pasado que se les ocurre una idea, genial por cierto, y aunque parece algo imposible de lograr bajo las circunstancias actuales en que viven, igual se avientan hasta que logran ver realizada su idea? Pues así fue con el #ManosalaMasaWorkshop. Si hace unos 3 o 4 años alguien me hubiera dicho que me dedicaría a enseñar a la gente cómo cocinar y hornear, y hacerles saber que ellos pueden lograr hacer cosas que quizá no se hubieran imaginado hacer nunca (como hornear un pan), la verdad no lo hubiera creído.

Cuando uno se avienta a hacer algo nuevo, siempre existe esa vocecita traicionera que nos hace pensar que nosotros no podemos, que es algo demasiado complicado, y que toma demasiado tiempo (tiempo que creemos que no tenemos además). Pero una vez que callamos esa voz, perdemos el miedo y simplemente nos aventamos a intentarlo con todas las ganas (aún sabiendo que quizá podemos fracasar), en ese momento cosas maravillosas pasan. Así pasó conmigo, y estoy segura que eso pasa con muchas personas que no se animan a hacer pan, hasta que lo hacen 🙂

El 10 de junio comprobé con mis propios ojos el hecho de quien quiere, puede. Fue padrísimo para mí escuchar a las chicas que vinieron al Workshop decir cosas como «nunca me había salido un pan tan bonito», «otras veces lo había intentado y por fin me sale», «siempre había querido hacer pan yo misma, y me imaginé que sería súper difícil».

Para mí fue un honor compartir un poco de mis conocimientos con ellas, para que ellas se dieran cuenta que la habilidad para lograrlo ya está en ellas. No me doy 100% crédito de los excelentes resultados que tuvieron todas, pues cada una lo hizo por sí sola. Yo solo me encargué de guiarlas en el proceso. ¡El resultado fue fantástico!

Me apasiona mucho el poder compartir con otros este deseo por hacer las cosas uno mismo, de crear conciencia de que no debemos depender de nada ni nadie para tener buena comida en nuestra mesa (o postres 😅). Me apasiona poder compartir mi aprecio por las cosas hechas en casa  y el hecho de que siempre (SIEMPRE) serán de mejor calidad que cualquiera que consigamos en otro lugar.

Así que, si me preguntan a mí, creo este primer #ManosalaMasaWorkshop, fue todo un éxito.

Comenzamos con un rico desayuno que, por supuesto, tenía que ser pan del mismo que aprenderíamos a hacer ese día. Fue un desayuno sencillo y ligero pero todas lo disfrutamos bastante. Fue el pan más chuleado del día 😁. Además, la platicada que nos echamos fue tan amena que nos mantuvo a todas con la energía y los ánimos al 100, no sólo durante el desayuno, pero durante toda la clase.

Después del desayuno comenzamos directo al punto: ¡Manos a la Masa! Todas trabajaron con todas las ganas  y a mí me inyectaban de ánimos cuando veía la sorpresa de todas al ver como esos ingredientes que mezclaron fueron tomando forma poco a poco hasta llegar al punto perfecto.

Siempre he creído que la mejor manera de aprender es haciendo las cosas uno mismo, así es como yo he aprendido a hacer todo lo que hago. Es por eso que en este taller quería que todas se involucraran en cada paso del proceso. Desde medir y mezclar los ingredientes hasta reconocer la apariencia que debe tener el pan cuando ya está listo. Meter los panes al horno, sacarlos, partirlos, comerlos, todo lo pudimos hacer juntas.

Al final del workshop, todas pudimos disfrutar de una deliciosa pizza recién salida del horno y de unos ricos panecillos rellenos que, si me preguntan, son de las mejores cosas que aprenderán a hacer en la vida 😉. Creo que fue la mejor manera de recompensar todo el esfuerzo y trabajo que hicieron.

Es muy cierto aquello que dicen que a veces termina aprendiendo más el que enseña que aquel al que se enseña. En el buen sentido, por supuesto, pues yo también terminé el workshop con mucho más de lo que comencé; y lo que es mejor, con muchas, muchísimas ganas de seguir compartiendo con ustedes esto que me gusta tanto hacer.

Muchas gracias a las asistentes, por confiar en mí y por el ánimo y buena vibra que se emanaba ese día. Muchas gracias a aquellos que han mostrado interés en aprender, es por ustedes que estos workshops seguirán sucediendo. Muchas gracias a mi esposo, por el apoyo incondicional que siempre me brinda, por ayudarme a tener hasta el último detalle listo para llevar a cabo el taller, y por siempre aprovechar y disfrutar de ese tiempo en el que yo hago esto con nuestras hijas.

Y claro, ¡mil gracias a ti, por leerme!

Me despido, con mucha felicidad, anunciando las fechas de los próximos Workshops. Pueden ver los detalles del más próximo dando click en el enlace. , los costos, y todo lo que pueden ganar si asisten a uno de estos 🙂

Sábado 15 de julio – #ManosalaMasaWorkshop: Pan Blanco. Para más detalles da click aquí.

Sábado 29 de julio – #ManosalaMasaWorkshop: Panadería Casera. Para más detalles da click aquí.

Sábado 19 de agosto – #ManosalaMasaWorkshop: Pan Integral y Multigrano. Detalles por venir.

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